Los arrestos fueron concretados este sábado por la mañana en tres allanamientos realizados en Ibarlucea, Villa Gobernador Gálvez y Funes.
Una mujer policía y dos patovicas que trabajaron en el boliche Ming River House, la noche en que murió luego de caer en las aguas del río Paraná Carlos “Bocacha” Orellano, fueron detenidos este sábado por la mañana en una serie de allanamientos llevados a cabo por orden del fiscal Patricio Saldutti, a cargo de la investigación del caso.
Los arrestos fueron efectuados por personal de la división de Asuntos Internos de la policía de Rosario. La agente policial, identificada como Karina L.G. de 41 años, fue aprehendida en un operativo que se llevó a cabo a primera hora de hoy en una vivienda ubicada en Chacabuco y San Lorenzo, en Ibarlucea.
En Santiago del Estero al 400, en Villa Gobernador Gálvez, fue detenido uno de los encargados de seguridad del boliche ubicado en la zona de La Fluvial, identificado como E.O.L de 30 años. En tanto que en Algarrobo al 200 bis, en Funes, quedó detenido F.C.M de 53 años, quien desempeñó la misma función la noche del deceso.
A los tres se les secuestraron los celulares, que serán peritados a fin de determinar si su contenido puede servir de prueba para esclarecer cómo murió el joven Orellano, cuyo cuerpo sin vida fue hallado el 26 de febrero de 2020 en el Paraná, dos días después de haber desaparecido, luego de haber ido a bailar al boliche Ming.
Los tres detenidos serán llevados a audiencia imputativa el próximo lunes. Según informó la Fiscalía, los roles y calificaciones legales que se le asignarán a cada uno se harán en la presentación judicial que hará el fiscal Sperdutti al exponer su teoría del caso que surge de medidas investigativas y testimonios.
En el marco de la causa ya se encuentra detenido con prisión preventiva dictada el identificado como Gabriel N., agente policial, quién será reimputado el lunes en audiencia en la que comparecerán los detenidos en los allanamientos de hoy.
La complicidad policial
La noche del domingo 23 de febrero de 2020, en la previa del feriado de Carnaval, Orellano fue con un gruop de amigos al boliche Ming, ubicado en la zona de La Fluvial. Según surgió de la investigación judicial, fue expulsado del local tras un altercado con una patovica cuando ingresó a un sector VIP.
Dos días después su cadáver apareció en las aguas del Paraná, a metros de la disco. En diciembre pasado fueron imputados cuatro policías por delitos relacionados con el caso: Karina G. y Gabriel N., que hicieron adicionales la noche del hecho, por incumplimiento de deberes de funcionario público y falsedad ideológica de instrumento público agravado, y al ex jefe de la comisaría 2ª Pablo B. y a Brenda L., por incumplimiento de deberes de funcionario público por no secuestrar las cámaras de seguridad del boliche y de la zona. Solo Gabriel N. quedó con prisión preventiva.
Los resultados de la autopsia
Los resultados de un análisis complementario de la autopsia, realizado por el Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, confirman que el joven de 23 años fue golpeado y ahorcado antes de morir.
El análisis dice que las infiltraciones hemáticas confirman que fue agredido en momentos anteriores a la muerte, lesionado en la zona posterior de las piernas, en ambos lados del hemitórax y en el cuello. Se pudo haber tratado de asfixia por ahorcamiento antebraquial”, explicó a La Capital el abogado querellante Salvador Vera.
Fuente:lacapital