Alertado por la segunda ola de contagios, le pedirá a las provincias que sean más duras en el cumplimiento de las medidas sanitarias, aunque no impedirá la circulación entre provincias.
Mientras definen los detalles de la resolución que impondrá nuevas restricciones a los vuelos hacia y desde el exterior, en la Casa Rosada miran de reojo la encrucijada que la gestión de Alberto Fernández tendrá en pocos días: permitir la circulación de personas en Semana Santa para reactivar la economía, pese a las complicaciones sanitarias que podría generar incrementar la circulación de personas ante la inminente llegada de la segunda ola de contagios de coronavirus.
En el Gobierno aseguran que reforzarán los controles para evitar desbordes en los centros turísticos pero aceptan que no impedirán la circulación de personas entre provincias para sostener la actividad turística y comercial. “Es, tal vez, el último gran efecto positivo de la economía antes de la posible segunda ola”, reconocen en la Casa Rosada.
Es por este motivo que hasta ahora las medidas que analiza implementar el Gobierno se concentran en las fronteras y en desalentar los vuelos desde y hacia el exterior. De hecho, la secretaria de Legal y Técnica Vilma Ibarra trabaja en los detalles de las nuevas restricciones, que obligaría a quienes lo hagan a pagarse el examen PCR a su regreso y que deban realizar una cuarentena de 14 días.
La Semana Santa se celebrará entre el sábado 27 de marzo y el lunes 5 de abril y en el Gobierno saben que habrá una importante movilización de personas hacia la Costa Atlántica, el sur y norte del país. En el Ministerio de Turismo de la Nación que conduce Matías Lammens se jactan de haber tenido una temporada de verano “positiva” que incluyó un movimiento económico de $200 millones sin haber tenido fuertes rebrotes.
La decisión del Gobierno es sostener la leve recuperación económica en abril y por eso mantendrá la libre circulación en el país pese al incremento de casos y el riesgo que implica el movimiento masivo de personas. En un año electoral, el bolsillo será clave para definir la contienda en las urnas y Alberto Fernández es consciente de la cuestión.
Más allá de esto, se les pedirá a las provincias que durante el fin de semana largo realicen un esfuerzo extra para controlar el cumplimiento de la cuarentena. De hecho Migraciones puso a disposición un tablero online con datos de movimiento, jurisdicción por jurisdicción.
En la reunión que el lunes mantuvieron Eduardo Wado de Pedro (Interio); Mario Meoni (Transporte) y Sabina Frederic (Seguridad) con los gobernadores de provincias con pasos fronterizos, se decidió aumentar los controles en los límites con otros países. Se pondrá particular atención en la situación epidemiológica de Bolivia, Paraguay y Brasil.
Entre otras cuestiones, se evaluó la implementación de corredores seguros vigentes para el reingreso de argentinos provenientes del exterior, que en un 70% residen en la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia. Según los registros migratorios, en la actualidad hay unos 27.000 argentinos en el exterior que podrían traer al país otras cepas, como la de Manaos o la de Sudáfrica. Esa es la cuestión que más preocupa a la Casa Rosada.
El Ministerio de Transporte trabaja por estas horas en el ordenamiento de los vuelos para garantizar la vuelta de argentinos en el exterior de forma ordenada y segura.
Los retrasos en el plan de vacunación obligaron al Gobierno a tener que tomar nuevas medidas de restricción. Es que hasta el momento, según los últimos datos del Monitor Público de Vacunación, se aplicaron 3.240.731 millones de dosis, de las que 2.618.750 corresponden al componente uno y 621.981 al dos.
Fuente: TN