Aunque el sistema de reservas nunca dejó de estar vigente, la Policía Federal y Gendarmería refuerzan desde hoy los operativos en las estaciones
Luego de que este martes Argentina registrara la jornada con mayor cantidad de casos de COVID-19 positivos desde el inicio de la pandemia -casi 21 mil-, y mientras las autoridades de la Nación, la Ciudad y la provincia de Buenos Aires no lograron ponerse de acuerdo para definir nuevas medidas para contener la segunda ola de coronavirus, desde hoy se reforzaron los controles en los trenes para intentar evitar los desbordes y las aglomeraciones.
El control en el transporte público es, precisamente, uno de los puntos más discutidos en torno a las posibles restricciones de circulación que se adoptarán en las próximas semanas. En los últimos días circularon imágenes de colectivos con más pasajeros parados de los permitidos -el límite es de 10 personas- y videos del transporte ferroviario en donde se podían ver vagones colmados de personas sin la distancia adecuada para prevenir contagios.
En la estación de Once, un nuevo mensaje en los altoparlantes indicaba ayer que a partir de este miércoles se reforzarían los controles de permisos en los andenes. “Desde mañana 7 de abril se volverán a pedir los permisos a trabajadores esenciales para viajar por lo menos en trenes”, decía el mensaje.
Sin embargo, la realidad es que el servicio Reservá tu tren nunca dejó de funcionar, ni tampoco perdió vigencia la obligatoriedad de contar con un permiso de trabajador esencial para viajar, pero desde hace varios meses que los controles en las estaciones disminuyeron notablemente.
Fuentes del ministerio de Transporte indicaron a Infobae que todos los controles “están a cargo de la Policía Federal (PFA) y la Gendarmería, no de los choferes ni de los trabajadores del ferrocarril” y que existen “operativos permanentes” en las estaciones Moreno, Merlo y Morón del Tren Sarmiento, que son las de mayor afluencia.
Fuentes de la PFA, además, confirmaron a este medio que a partir de esta semana se reforzaron controles con personal de Trenes Argentinos en las cabeceras y en algunas estaciones en particular.
Las reservas, por otra parte -que deben realizarse entre las 6:00 y hasta las 10:00 hacia la Ciudad de Buenos Aires y desde las 16:00 a 20:00 hacia el Gran Buenos Aires-, se controlan “en muchos casos por molinete, con las cámaras de validación”, que detectan temperatura y barbijo, además de las cámaras térmicas generales dispuestas en el ingreso de las estaciones.
También se comenzará a aplicar un nuevo producto de limpieza que fue validado por la ANMAT que es de alta duración con el que se busca reducir el contagio del COVID-19 por contacto.
En lo que se refiere a los colectivos, la imposibilidad también radica en la cantidad de unidades. Según las estimaciones que maneja la Casa Rosada y que le acercó el ministerio de Transporte, las unidades que se encuentran en circulación en el AMBA son el 85% del total del parque de colectivos, que ronda las 14.000 unidades.
El 25% restante no se encuentra en circulación porque los choferes se encuentran exceptuados por presentar comorbilidades, enfermedad o relacionados y no se pueden reemplazar, así que en el AMBA, los colectivos también están casi al máximo. “Al igual que los trenes, las empresas no pueden comprar más unidades ya que el desfase económico respecto de unidades y pasajeros es monumental”, explicaron las fuentes consultadas.
En cuanto a los subtes, en los últimos meses el gobierno porteño inició un proceso de reapertura de estaciones, que probablemente se verá suspendido con las nuevas medidas. Sin embargo, no habrá marcha atrás.
En el comienzo de la pandemia, Sbase, la empresa que tiene a cargo la administración del subte en la Ciudad, disminuyó al 5% la cantidad de pasajeros trasladados y, hacia la segunda mitad de 2020, a medida que declinó la curva de contagios, se permitió que viajen hasta 15 personas paradas por vagón junto con la apertura de más bocas de subte.
En total, ya están habilitadas 60 de las 90 terminales y, según fuentes del gobierno porteño, actualmente viaja bajo tierra el 20% del caudal que se desplazaba antes del coronavirus.
Con el respaldo de una serie de estudios científicos locales e internacionales, creen que ese medio de transporte no es un foco de contagio si se respeta la distancia social. “El tiempo promedio de viaje es de entre 13 y 15 minutos, y hay buena ventilación. El subte, al contrario de lo que puede decir el sentido común, no es un problema”, señalaron a este medio desde Metrovías. Con ese panorama, todavía no está claro si las medidas restrictivas sobre el transporte modificarán demasiado la dinámica actual del subte.
En el caso de los trenes, según indicaron desde la cartera que conduce Mario Meoni, el servicio “está al máximo de frecuencias y unidades”, a pesar de que el ministerio está en proceso de compra de nuevas formaciones.
Desde este lunes, en tanto, el ferrocarril Mitre funciona con un diagrama especial en todos sus ramales debido a la aplicación del protocolo COVID-19 luego de que se registraran 21 casos positivos en el Puesto Control Trenes (PCT), donde se comanda la operación ferroviaria.
El personal del PCT, al ser especializado, impide ser reemplazado, lo que dificulta la circulación en los horarios regulares. En la última semana, informó la agencia Télam, la cantidad de contagios del personal de la empresa se duplicó.
Según se precisó en un comunicado oficial, los trenes de los sectores Retiro-Tigre, Retiro-Suárez y Retiro-Bartolomé Mitre comenzarán a prestar servicios a las 6, mientras que los diésel lo harán hasta las 14.
El refuerzo de medidas y controles se produce luego de que la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, informara que se esperan tres semanas claves en las que se buscarán tomar medidas “intensivas, transitorias, tempranas y localizadas” para contener los contagios.
Este viernes, por lo pronto, vence la última prórroga del DISPO (Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio), por eso el presidente Alberto Fernández pretende publicar esa misma madrugada el decreto que oficialice nuevas medidas.
En su habitual reporte semanal, ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, reconoció este miércoles que hay diferentes miradas en cuanto a la “intensidad” y la “modalidad” de las nuevas medidas restrictivas pero aclaró que hay consenso en la necesidad de limitar el transporte público, disminuir críticamente el riesgo de interacción social durante la noche y las reuniones sociales, familiares y laborales, que son los principales focos de contagio para las personas de 20 a 40 años.
Fuente: infobae