CÓRDOBA. El anuncio de Sergio Massa sobre el Impuesto a las Ganancias no fue un mero acto oficial. En el escenario montado a las afueras del Ministerio de Economía, el referente del oficialismo gatilló la parte más gruesa de su campaña, juntando tanto al ministro como así también al candidato de Unión por la Patria para accionar al mismo tiempo.
Esa imagen de dos papeles protagónicos separados que Massa intentó instalar luego de las PASO, cuando prometió que sería ministro por un lado y candidato por el otro, ya se desvaneció al calor de la campaña y la necesidad de tomar el rumbo de una elección que se presenta complicada. Por eso, el líder del Frente Renovador ya no especulará con mantener los asuntos separados, sino que deberá encarar ambos roles al mismo tiempo (una tarea nada fácil).
En ese orden, Massa comenzó a empujar el plan con el que intentará forzar un ballotage con Javier Milei en octubre. Dentro de ello, hay un punto clave en el mapa argentino: Córdoba.
A pesar de que en esa provincia el kirchnerismo obtuvo apenas el 8% de los votos en las PASO, Sergio Massa tiene pensados al menos tres desembarcos de cara a octubre ya que allí hay una fuente de votos peronistas que podrían marcar la diferencia entre la continuidad o el olvido. Esa fuente pertenece hoy a Juan Schiaretti, el candidato a presidente de Hacemos por Nuestro País que obtuvo casi el 4% de los votos en las PASO.
En esa competencia electoral, el cordobés cosechó gran parte de los 900 mil votos totales en Córdoba, lugar en el que se concentra un núcleo duro de votantes de al menos 500 mil. Una fidelidad muy dura de romper, aunque según confían en el oficialismo, no resistiría al temor de un nuevo gobierno “neorliberal”.
El desembarco de Massa en Córdoba, que podría tener un primer capítulo la próxima semana, llegará con una consigna clara: el voto útil. Lejos de buscar confrontar con Juan Schiaretti, el candidato de UxP volverá a la provincia mediterránea para plantear el accionar del voto peronista e intentar inducir el corte de boletas.
Como es sabido, Schiaretti tiene pocas esperanzas de llegar a la Casa Rosada. De hecho, su aventura presidencial sigue en pie para generar poder de bancada en el Congreso, que estará sumamente fraccionado en 2024.
Atento a ello, Sergio Massa planea una fuerte campaña por el corte de listas. Algo que altera al ‘Gringo’ de sobremanera ya que se reconoce como la locomotora de una lista que se ofrece como defensora del federalismo.
Por supuesto, el gobernador cordobés ya demostró que no se quedará cruzado de brazos. Anoticiado del rumbo de Massa fijado en Córdoba, Schiaretti ya activó sistemas de “defensa” que no supo tener que utilizar en las PASO.
De hecho, el ’Gringo’ criticó personalmente el anuncio de Massa sobre Ganancias, algo que no había hecho de manera puntual. E incluyó una chicana.
“Massa se hace el Papá Noel con plata que no es del Estado nacional, sino de todas las provincias”, arrojó en redes sociales el candidato a presidente cordobés. Un estilo que sorprendió a propios y extraños, pero que es parte de un repertorio de “armas” sugerido por quienes lo acompañan.
La reacción de Schiaretti sería proporcional a la carga de campaña que Massa plantearía para restarle votos. En ese sentido, la medida de reducción de la nómina de contribuyentes del Impuesto a las Ganancias fue un golpe incómodo para el cordobés, que además aclaró su postura ante la reducción impositiva.
“Nosotros estamos de acuerdo con bajar la carga impositiva a trabajadores y al sector productivo. Es poco serio e irresponsable hacer anuncios electoralistas con la plata ajena: el 61% de lo recaudado del Impuesto a las Ganancias es de las provincias”, se desquitó. Así, el gobernador cordobés marcó un claro rumbo de confrontación con el oficialismo para poder defender su caudal de votantes.
Para el cordobés, es importante que su campaña no pierda de vista lo sucedido en las provincias donde cayeron los oficialismos. Casi en todas ellas, el patrón común del fracaso fue el acercamiento al kirchnerismo.
Por eso, Juan Schiaretit no querrá que se lo asocie a ningún tipo de lógica conjunta con Unión por la Patria. Como lo sería el corte de boletas que propondrá Sergio Massa.
Respuesta pasada de rosca
Si bien Massa no perdería energía en contestar agravios y cruces propuestos por sus competidores, desde UxP si surgieron respuestas a las chicanas de Juan Schiaretti. Por supuesto, las mismas derivaron desde el kirchnerismo duro.
El encargado de replicar la crítica fue Fabián Francioni, intendente de Leones y hombre cercano a Cristina Kirchner en Córdoba. «Pipi» es además uno de los armadores de la campaña de Massa en la provincia, por lo que resulta un nombre clave.
“Juan querido, con el respeto que te tengo, no hay poronga que te venga bien!!! Cómo decimos acá en el campo: Sos como la gata flora. Ojo: el peronismo de Córdoba te va a castigar”, dijo Francioni en un descargo personal y muy alejado al estilo massista. Una respuesta que generó tanta polémica dentro del círculo del candidato de UxP, que terminó generando la eliminación del mensaje posteado en redes sociales.
Para aclarar sus dichos, Francioni prestó una entrevista a Radio Mitre, donde prestó una contestación más decorosa. “Uno se va cansando de tantas cosas que van ocurriendo durante tantos años y viendo que lo único que preocupa es el posicionamiento personal y no el bienestar de muchos cordobeses y argentinos, yo creo que no es un momento de gloria ni para tirar manteca al techo en ningún lugar, y menos en la política, la gente está muy molesta, enojada, muy preocupada con lo que sucede”, alegó.
Así, la competencia entre el peronismo cordobés y el oficialismo nacional podría tomar una temperatura impensada de cara a octubre. Un mes donde cada uno de los votos va a ser clave para definir un posible “alargue”.
Fuente: urgente24