Desarrollo del caso en Córdoba
La investigación sobre la conocida «casita del after», un local en Córdoba donde supuestamente se llevaron a cabo fiestas clandestinas durante más de 11 años, ha dado un nuevo giro con la imputación de N.A., quien es considerado el organizador principal de estos eventos. Este desarrollo se produce luego de un trágico incidente en agosto, cuando un conductor embistió a un grupo de jóvenes tras una pelea.
Imputación y amenazas
Según confirmaron fuentes legales, la Fiscalía de Instrucción del Distrito 4 Turno 4, liderada por Liliana Copello, ha procesado a N.A. por amenazar a dos vecinos que se atrevieron a denunciar los eventos ilegales y la violenta riña que culminó con el atropello. Como parte de las medidas cautelares, se ha impuesto una orden de restricción que impide al imputado comunicarse con los denunciantes y sus familias. Junto a él, también están siendo investigados su padre y hermana, quienes fueron identificados por testigos como co-organizadores de las reuniones clandestinas.
Denuncias inesperadas
En un giro inesperado, los tres imputados han denunciado a autoridades municipales, entre ellas al ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, así como a otros funcionarios tras un megaoperativo llevado a cabo el 5 de julio en el local, donde se detectó la presencia de más de 400 personas, incluidos menores, bajo condiciones deplorables de higiene y seguridad. Entre las serias deficiencias se encontraron:
- Cableado eléctrico expuesto.
- Falta de extintores.
- Inexistencia de luces de emergencia y señalización.
- Ausencia de autorización municipal para operar.
A raíz de esta intervención, el Ente de Fiscalización y Control de la Municipalidad (EMFyC) presentó una denuncia ante la Unidad Judicial de Delitos Económicos, además de iniciar acciones administrativas por violaciones al artículo 92 bis del Código de Convivencia, lo que llevó al cierre del lugar. Sin embargo, a pesar de las restricciones, las fiestas continuaron realizándose hasta el 24 de agosto, momento en que varios jóvenes fueron atropellados en una pelea.
Detalles del atropello y la investigación
La investigación sobre el incidente del 24 de agosto ha revelado que, al menos, cuatro personas fueron arrolladas por un automóvil después de una discusión que se llevó a cabo frente a la fiesta. A pesar de la llegada de las autoridades, los rastros del incidente habían desaparecido, y el único herido presente se negó a formalizar una denuncia.
Sin embargo, se ha informado que el principal herido se encuentra evolucionando favorablemente, aunque aún requiere tratamiento para una lesión en el ojo, sin riesgo inminente de perder la visión. El altercado se inició dentro del local y se trasladó a la vía pública, donde un vehículo regresó y arremetió contra un grupo de jóvenes, entre ellos tres motociclistas. Según relatos de testigos, el conductor se dio a la fuga tras el impacto.
Un residente del área describió la escena: «Se pelearon adentro del boliche y luego continuaron afuera. La pelea implicó a un motorista y al conductor. Este último regresó y los chocó». Las imágenes de una cámara de seguridad capturaron el instante preciso del incidente, mostrando cómo el auto embiste a una motocicleta y a otros jóvenes en la calle. La secuencia se cerró con gritos, corridas y una rápida huida de las personas implicadas.
La primera llamada a la Policía ocurrió alrededor de las 8 de la mañana, pero al momento de llegar, no encontraron evidencia del incidente. Posteriormente, una hora después, se recibió otro aviso al 911, y la respuesta policial volvió a ser infructuosa, ya que no había heridos ni vehículos involucrados en el siniestro. No obstante, un joven de 19 años se presentó por su cuenta en el Hospital de Pronta Atención Cura Brochero, con una fractura de brazo y lesiones en la nariz.