Derrota inesperada del Sevilla Fútbol Club
El Sevilla Fútbol Club sufrió una sorpresiva derrota en su estadio, el Ramón Sánchez Pizjuán, al caer ante el RCD Mallorca por 1-3. Este resultado se produce tras una emocionante victoria ante el Barcelona en la fecha anterior, lo que había elevado las expectativas entre la afición sevillista.
Inicio prometedor, desenlace desafortunado
El encuentro comenzó con gran entusiasmo para el equipo local, que se encontraba en la séptima posición de la tabla y venía de lograr dos victorias seguidas. El gol de Rubén Vargas a los 17 minutos parecía fortalecer la confianza de los seguidores. Sin embargo, el panorama cambió drásticamente en la segunda mitad. Vedat Muriqi consiguió el empate a los 67 minutos, y el joven Mateo Joseph, que ingresó poco antes, anotó dos goles en los últimos minutos, alterando el resultado a favor del Mallorca.
Un enfrentamiento directo con la afición
Al finalizar el partido, la frustración de los aficionados se hizo palpable. Un momento destacado fue el intercambio entre Matías Almeyda y un aficionado de larga trayectoria, que se sintió molesto por el desempeño del equipo. Almeyda no evitó la crítica y se tomó un momento para escuchar al seguidor que lo abordó tras el pitido final.
Explicaciones en la rueda de prensa
En la posterior rueda de prensa, el técnico argentino se refirió a este encuentro con el seguidor: «Escucho lo bueno y lo malo. Estaba enfadado y con razón. Había que darle su espacio para que descargara. Me la tuve que aguantar». Estas palabras reflejan la comprensión de Almeyda hacia la frustración de los hinchas, especialmente tras una caída que contrasta con la goleada sobre el Barcelona solo una semana antes.
Los retos del Sevilla y la esperanza del Mallorca
Este revés ante el Mallorca, que era colista, dejó al Sevilla con apenas dos triunfos como local en este 2025, lo que es un rendimiento inusual para una institución de su calibre. En el ámbito táctico, Almeyda intentó reactivar al equipo realizando un triple cambio en la segunda mitad, introduciendo a Januzaj, Alexis Sánchez y Akor Adams, pero no logró revertir la situación. La victoria representa un respiro para el Mallorca, que, hasta entonces, no había logrado ganar como visitante en la temporada, permitiéndoles escapar de la zona de descenso y avivando sus esperanzas de permanencia en LaLiga.