Un momento histórico para México
En la noche del lunes, Claudia Sheinbaum lideró su primer Grito de Independencia en la Ciudad de México, convirtiéndose en la primera mujer en hacerlo en más de 200 años. Este evento, considerado uno de los más simbólicos y concurridos del país, rememora la llamada de Miguel Hidalgo y Costilla a levantarse en armas contra el colonialismo español.
Enfoque en grupos marginados
Durante su discurso, Sheinbaum hizo hincapié en la importancia de reconocer a los grupos más desfavorecidos de la historia nacional: mujeres, indígenas y migrantes. Además de rendir homenaje a mujeres históricas como Leona Vicario y Josefa Ortiz Téllez-Girón, también incluyó a las heroínas anónimas y a las mujeres indígenas, destacando su papel en la historia del país.
Asistencia masiva y contexto político
El Zócalo capitalino se llenó con aproximadamente 280,000 asistentes, cifra que refleja la capacidad total de la plaza. Sin embargo, esta multitud no necesariamente indica el clima político, ya que en las últimas cuatro administraciones ha habido una asistencia similar. A pesar de estas cifras, la analista política Celeste Tossolini destaca que el evento reafirmó la influencia política que Sheinbaum ha establecido durante su primer año de mandato, convirtiéndola en una de las figuras más poderosas del país.
Un nuevo estilo de liderazgo
Sheinbaum ha logrado construir un poder significativo, controlando 24 de las 32 provincias y la mayoría de los escaños en el Congreso. Según una reciente encuesta de la consultora Enkoll, un 79% de los encuestados aprueba su gestión. Pese a enfrentar críticas por reformas judiciales y el aumento de la violencia, las cifras reflejan un apoyo considerable hacia su administración.
Retos y estrategias en su gestión
La violencia y la inseguridad continúan siendo grandes desafíos para el gobierno de Sheinbaum, con 206,724 homicidios registrados durante la administración anterior. A pesar de esto, Tossolini sugiere que su enfoque es más confrontativo que el de su predecesor, centrado en la atención a las causas de la pobreza, el fortalecimiento de la Guardia Nacional y la mejora de las instituciones. Sin embargo, el 46% de los encuestados señala que la inseguridad es el principal problema que enfrenta su gobierno.
Un futuro incierto
El proceso electoral reciente fue criticado por una baja participación del 13%, generando dudas sobre la efectividad de las reformas propuestas. Aun así, la elección de Hugo Aguilar Ortiz como presidente de la Suprema Corte de Justicia marca un intento de cambiar la estructura judicial del país, aunque expertos advierten que este cambio puede conllevar riesgos para los equilibrios de poder en la república. En este contexto, el acto del 16 de septiembre no solo simbolizó un cambio histórico, sino que también planteó interrogantes sobre el futuro del liderazgo político en México bajo Sheinbaum.