La crisis en el Hospital de Pediatría Dr. Juan Garrahan se metió de lleno en la agenda parlamentaria y se transformó en el punto de convergencia de un amplio arco opositor que busca acorralar al oficialismo en la Cámara de Diputados.
Este martes 03/06, la Comisión de Acción Social y Salud Pública se reunirá desde las 12:30 para discutir una serie de proyectos que ponen en foco la crítica situación presupuestaria, salarial y de infraestructura que atraviesa el principal centro de salud pediátrica del país.
La cita contará con la participación de trabajadores del hospital y una inédita presencia de ministros de Salud provinciales: confirmaron asistencia (presencial o remota) funcionarios de Buenos Aires, Córdoba, Neuquén, La Rioja, Formosa, Tierra del Fuego y la Ciudad de Buenos Aires.
El oficialismo libertario, en minoría dentro de la comisión, enfrentará un escenario adverso en el debate.
El Garrahan y la crisis en la salud pública
En ese sentido, y aprovechando la crisis en el Hospital Garrahan y la salud pública en general, los bloques opositores confluyeron en proyectos que apuntan directamente al Ejecutivo nacional. Entre ellos, una iniciativa encabezada por la diputada socialista Mónica Fein, junto a legisladores del radicalismo, el PRO, el peronismo y espacios federales, que exige al Gobierno que garantice de manera inmediata el financiamiento del Garrahan.
A su vez, el texto también busca declarar al hospital como institución de referencia nacional en alta complejidad pediátrica.
“La falta de recursos compromete la atención de miles de niños y niñas en todo el país”, sostienen en el proyecto. A la par, legisladores de Unión por la Patria, como Micaela Morán y Pablo Yedlin, presentaron propuestas que denuncian el desfinanciamiento del sistema sanitario y buscan declarar la emergencia sanitaria pediátrica y de las residencias médicas.
Yedlin, presidente de la comisión y ex ministro de Salud tucumano, advirtió que “la situación es insostenible”: mencionó escasez de insumos médicos críticos, deuda salarial, renuncias masivas de profesionales y áreas cerradas por falta de personal. “Esto no es una alarma partidaria, es un grito de emergencia del sistema”, afirmó.
Problema salarial y proyectos al respecto
El deterioro de los ingresos del personal del Garrahan también fue abordado en el Congreso. Específicamente, la diputada radical Marcela Coli, presentó una iniciativa respaldada por figuras como Julio Cobos, Margarita Stolbizer y Mario Barletta. “No podemos permitir que un médico gane por debajo de la línea de pobreza. La salud pública se vacía si quienes la sostienen se van al sector privado o directamente al exterior”, expresó.
Los proyectos coinciden en señalar que «la política de ajuste implementada por el Gobierno nacional» impacta de lleno en uno de los hospitales más emblemáticos del país.
La respuesta oficial: No hay plata (y muchos ñoquis)
Desde el Ejecutivo, el ministro de Salud, Mario Lugones, buscó responder a las críticas con un anuncio de última hora: a partir de julio, los médicos residentes del Garrahan recibirán un incremento que llevará sus ingresos a $1.300.000. Según explicó, el aumento será financiado con ahorros generados por “eliminación de gastos superfluos” y la implementación de un nuevo sistema biométrico de control de asistencia.
Sin embargo, la respuesta fue leída por varios diputados como “insuficiente” y “tardía”. Desde Unión por la Patria aseguraron que se trata de un parche que no resuelve el deterioro estructural del hospital ni la crítica situación de cientos de profesionales.
La reunión de comisión de este martes 03/05 será clave para medir la capacidad de la oposición para avanzar con sus reclamos y poner al Gobierno a la defensiva. El oficialismo, representado por el vicepresidente de la comisión, Manuel Quintar, y otros cuatro diputados libertarios, enfrentará un bloque opositor articulado y dispuesto a capitalizar políticamente la situación.
En un contexto donde la salud pública se encuentra bajo presión, la oposición encontró un punto de consenso para avanzar con una agenda que busca limitar los recortes y reabrir el debate sobre las prioridades presupuestarias.