Erika Kirk recuerda a su marido con un poderoso discurso
En un conmovedor acto que duró 17 minutos, Erika Kirk no pudo contener las lágrimas mientras leía el discurso en homenaje a su esposo, Charlie Kirk, el activista pro Trump que fue asesinado en Estados Unidos. Su voz, entrecortada y llena de dolor, reflejó la profunda pérdida que siente a tan solo dos días del trágico suceso. Erika, de 36 años, rompió el silencio a través de las redes sociales de Turning Point USA, la organización que había fundado su esposo.
“Los gritos de esta viuda resonarán en todo el mundo como un grito de guerra”, afirmó, asegurando que Charlie «llevará la gloriosa corona del mártir por toda la eternidad».
Palabras de agradecimiento y recuerdos de un gran hombre
Erika inició su discurso agradeciendo a las fuerzas del orden y a los primeros en responder que intervinieron durante el incidente. También expresó su gratitud hacia la junta directiva de Turning Point USA y aquellos que apoyaron a su familia en este difícil momento.
El mensaje continuó reflexionando sobre el amor y el compromiso de Charlie hacia su familia, su país y los valores que siempre promovió. Dijo: «Charlie amaba, amaba la vida, amaba su vida, amaba América… sobre todo, amaba a sus hijos y me amaba a mí con todo su corazón».
La misión de Charlie continúa
Erika declaró la firme intención de mantener viva la misión de Charlie: “El movimiento que mi esposo construyó no morirá. Me niego a que eso suceda, no morirá, todos nosotros nos negaremos a que eso suceda”. Expresó su deseo de que su legado siga adelante, y que su trabajo en Turning Point USA se expanda.
- Erika llamó a todos los jóvenes a unirse al movimiento.
- Reiteró la importancia del activismo y la educación en las universidades.
- Invitó a todos a participar en eventos como el AmericaFest programado para diciembre.
También recordó a Charlie como un hombre de fe, que aspiraba a revivir la familia estadounidense, cumpliendo así un plan divino en el que creía fervientemente. “Mi esposo dio su vida por mí, por nuestra nación, por nuestros hijos”, comentó.
Un legado de amor y compromiso
Erika hizo un llamado último para que todos quienes apoyaron a Charlie continúen su legado. “Escúchenme cuando digo esto: nadie es demasiado joven para conocer el evangelio, nadie es demasiado joven para involucrarse en salvar a este hermoso país”, concluyó, reafirmando su compromiso de que el legado de su esposo nunca será olvidado.