La mujer de 32 años que fue detenida este martes por la seguidilla de amenazas de bomba contra distintas entidades bancarias de Rosario será imputada en las próximas horas por el delito de intimidación pública, que prevé una pena de 2 a 6 años de cárcel. Así lo afirmó hoy el fiscal Franco Carbone, de la Unidad de Flagrancia y a cargo de la investigación de los hechos que tuvieron en vilo durante varios minutos a la city rosarina.
El funcionario del Ministerio Público de la Acusación (MPA) agregó que la sospechosa -identificada como Cintia B- “dio versiones distintas” de lo ocurrido y se intenta establecer cuál fue su motivación para hacer los llamados. Además, adelantó que en las próximas también solicitará que la acusada quede en prisión preventiva mientras avance el proceso que terminará en un juicio. En cuanto a ese paso procesal, desde el MPA anticiparon que se realizará mañana jueves en horario a confirmar.
En declaraciones al programa “El primero de la mañana” de LT8, Carbone reveló que la investigación que permitió dar con la presunta responsable de las amenazas “no demandó mucho esfuerzo, porque la misma persona que realizó el llamado amenazante fue la que atendió el llamado que le devolvió la central del 911″. Precisó: «Ella reconoció haber llamado, pero aclaró que fue una pareja que la interceptó en el centro de la ciudad y la amenazó para que hiciera esos llamados”.
“Para esta Fiscalía, ese relato no es la verdad de lo ocurrido. Estamos trabajando sobre cámaras de videovigilancia para constatar lo que según ella dice que pasó. Pero, por distintos pormenores, nuestra teoría es que mintió y que el llamado lo realizó ella. Lo que estamos investigando en estas horas es el móvil o qué la llevó a realizar semejante amenaza”, subrayó Carbone.
El fiscal resaltó que la mujer ahora deberá enfrentar una causa penal, en la que será imputada por intimidación pública. “Pediremos que quede en prisión preventiva. La pena para la figura jurídica es de 2 a 6 años de prisión”, sostuvo.
Cintia B. fue detenida poco después del mediodía de este martes en su casa en la zona sur de Rosario. La policía de la Agencia de Investigación Criminal y otras secciones policiales llegaron hasta allí siguiendo el rastro de la misma llamada que al parecer la mujer realizó desde su casa con su teléfono, que también fue incautado.
La mujer sería quien realizó este martes llamadas a la central del 911 en las que alertó sobre la colocación de bombas en tres entidades bancarias ubicadas en el microcentro y dos más en la zona sur de Rosario. La novedad causó un importante revuelo ya que la amenaza se produjo cuando los bancos se encontraban en plena actividad y tanto empleados como clientes e inclusos vecinos de lugar debieron ser evacuados hasta que la policía de la Brigada de Explosivos determinó que se trató de una falsa alarma.
Fuente: Lacapital